Mediante tu abrazo me transmites calor,
también percibo tu
olor,
y me quitas el profundo dolor
que llevo en mi
interior,
soportando durante mucho tiempo,
porque
siento mucho temor,
a la soledad,
y a la
poca humildad que descubro
cuando estoy a la
mitad de mi ser,
sin creer,
qué me pudiera suceder.
Un abrazo, cuando es de verdad, tiene el poder de resetearte, equilibrar tu alma y ponerte de nuevo en pié. Una poesía preciosa, Mari Carmen.
ResponderEliminar