martes, 4 de noviembre de 2014

La Española cuando besa... por Luis Escalante



LA ESPAÑOLA CUANDO BESA.......


Dicen que nadie nos ha enseñado a besar Que se aprende solo, que es cosa del instinto.
!Pero que placer cuando a tientas en la noche Unos labios aun sin nombre, te buscan...
te sorprenden!





Desde hace al menos un lustro, cada verano despues de trabajar duro todo el año, me tomo unos dias libres para embarcarme en algun tour organizado a algun rincon perdido. Me gusta hacerlo sola, sin Fernando, sin los niños. Lo necesito y ellos lo saben. Este año, y como la crisis no cede, siendo consecuente, decidi buscar ese rincon mas cerca. Opte por irme a Londres, ciudad cosmopolita, variopinta, donde puedes pasar perfectamente despercibida, hagas lo que hagas y tengas el aspecto que tengas.
  
Desde que llegue presenti que serian unas vacaciones diferentes, pero en ningun momento esperaba vivir lo que aquella noche de agosto me aconteceria en el SOHO, ese barrio alternativo y bullicioso londinense, y que seguidante te narrare.
 
Ni las tiendas, ni los museos, ni los monumentos, ni la city, me impresionaron tanto. Fue como estar, sin saberlo, dentro de una pelicula, y aun me tiemblas el cuerpo al recordarlo. Mientras duro el tour recorri los bohemios bares del Soho, de sofocante ambiente variopinto. ¿Sabes lo que te digo?. En Sevilla ni siquiera salgo de dia, trabajo, niños, casa..... Y no me iba a privar de las famosas noches londinenses lejos de la familia. Los escaparates y el placer de mezclarme anonimamente con la multitud, estan bien, pero los viajes organizados son deprimentes y por eso me gusta buscarme la vida sola. Asi descubri el Red Lion, un bar de copas que esta en Old Compton Street. Algo cutre, si, pero era como en las pèliculas.
 
Eran las 8 de la noche, tarde para un ingles, sin duda temprano para mi. Entre me pedi un refresco y me sente en un rincon del local, donde podias observar todo lo que sucedia. El lugar estaba casi vacio, era intimo pero de colores algo llamativos para mi gusto.En la barra habia una pareja que no dejaba de discutir. El parecia un hombre noble, tal vez algo lacio, pero su mirada desprendia desolacion. No estaba mal. Ella estaba algo hebria cada vez hablaba mas alto. Su novio pasaba una verguenza tremenda y me miraba como pidiendo disculpas por el numero que montaba su chica. Ojala hubiese sabido mas ingles del que aprendi en la universidad, para entender lo que le decia a gritos, por que el tenia cara de estar diciendo..!!tierra tragame!!!. Me lo estaba diciendo a gritos con sus ojos azules. En ese momento ella, comenzo a coquetear con el otro.

El otro tambien estaba sentado en la barra, interesandose de vez en cuando por la discusion echandole unos descarados reojazos a la chica. Ella, seguro que por las copas, lo relamia con la mirada y le enseñaba sin pudor, la punta de la lengua, mientras el desamparado novio buscaba mi complicidad, muerto de verguenza. El el chico no aguanto mas y se fue. Entonces ella avanzo como una gata contoneandose hacia ese hombre que la incendiaba de deseo. Observando como se comian y acariciaban indiferentes al mundo, me pregunte si a mi me podrias ocurrir algo asi. ¿Comop saberlo si nadie me ha miorado jamas de aquella manera?. Mi marido no es tierno, pero tampoco se pone animal como aquel hombre se estaba poniendo en la barra. Y la rubia, dejando a su novio tirado, se estaba entregando a un desconocido tan solo por una mirada que le habia hecho sentir unica, deseada y especial. Las bragas se me estaban empapando, cuando regreso el novio al Red Lion cerrando la puerta ruidosamente.
 
El hombre se solto de las chica y se marcho rapido a los servicios. Y como tampoco era plan quedarse para presenciar una pelea, me fui corriendo al de señoras. La luz era pobre y olia a sexo. Mientyras me palpaba la braguita, escuche gritos y golpes. Todo eran ruidos y palabras incomprensibles, quizas obscenas. Me dolian los labios de tsnto cerrarlos y mis dedos apestaban como el baño. Cuando todo termino, volvieron a mi mente los ojos azules del novio y me alegre haberle evitado otro momento de verguenza ajena. Entonces me anime a salir...

El chico se habia marchado y ella estaba agarrada otra vez al hombre de la barra. Se besaron de nuevo, esta vez sin pasion, y entonces el se marcho subitamente. Cerre la puerta del Red Lion, mientras observe a la chica tirada sobre la encimera de marmol, vomitando. Descubri al novio que la aguardaba, enamorado todavia, en el pasadizo oscuro que conducia a la Avenida . La misma mirada, suplicante, avergonzada y melancolica. !Lo que daria por que me quisieran !asi!

Sin duda aquella noche hizo que mis vacaciones fueran diferentes, como si formara parte de una pelicula.


El hombre de la barra I


¿Quien dice que en Londres no pasa nada en verano?. El Soho ya no es lo que era, pero cuando menos te lo esperas sucede algo extraordinario. La noche habia sido agotadora, una pelea de borrachos, un negro colandose sin pagar billete, un drogata esnifando coca.....lo de siempre..... asi que apenas termino mi turno en el metro me marche para relajarme, a un bar de putas, el Red Lion, creo.
 
Nada mas entrar, el barman me señalo con las cejas a una chica nueva que bebia ginger ale en una mesa del fondo. Parecia cansada, algo ojerosa, quizas enferma. No tenia las tetas gordas pero prometia un buen polvo. Pedi un Scoth para ir calentandome cuando llego la MaryJoe. Aunque MaryJoe esta un foco desfondada, sigue siendo la que mejor la chupa del SOHO. No hay nada como un giving head antes de irse al sobre, asi que entre lo malo conocido y lo peor desconocido me bebi el whiski saboreando el inminente mamazo del MaryJoe.

Los chulos no deberian de dejarse ver por los clientes porque es de mal gusto. MariJoe queria saber que hacia una nueva en su zona y el maromo le juraba que no era de su ganaderia. Pero esa zorra tenia que ser una autentica profesional por que le sostuvo la mirada al chulo sin pestañear. MaryJoe me pregunto como estaba y yo le dije que muerto de calor. En cuanto su chulo salio a preguntar de quien era la nueva chica del Red Lion, la chica se acerco y me cogio la polla. Hay gestos que valen mas que mil palabras.
 
La nueva resulto ser una que iba por libre y el chulo regreso furioso metiendo una patada en la puerta. Mierda de tio, justo cuando estaba empalmado. MaryJoe me pidio que la esperara en el baño se señoras y me meti sin encender la luz. Me la estaba machancando cuando alguien entro de golpe: era la nueva. Las luces de neon de la calle iluminaban el baño con relampagos de colores y entonces la vi mucho mas guapa que en el salon: tendria unos treintaitantos, estaba delgada y sus piernas todavia parecian duras. Cuando una tia cierra el pestillo delante de una polla tiesa sobran las presentaciones, pero yo le dije algo dulce, “Come honey, y ella me llamo cariño”, en español original.
 
 

Las hispanas son asi de apasionadas. Yo he conocido muchas mujeres, ya sabes, follando, pero esta tia en cuanto me vio se arrodillo y me cogio suavemente la polla. No entendia que estaba pasando, pero como te la chupaba la hijaputa. Ya sabes, como si te quisiera mucho: con la lengua, con los dedos, con los labios, con los ojos. !Que manera de mirarme a los ojos!. Me chupo hasta los testiculos y no se corto ni un pelo cuando el chulo comenzo a aporrear la puerta. Una gran profesional: segundos antes de correrme, se quito las bragas y se encabrito sobre mi polla, mientras me repetia en su idioma tan dulce: “Cariño, cariño. Ay, cariño”. No le importaron los golpes, no le importaron mis gritos, no le importo un carajo el escandalo. Si no fuera por que yo mismo lo creo imposible, juraria que tambien se corrio. Deje un billete de 50 Libras en el lavabo, lo justo para aquella obra de arte que acaba de disfrutar, y sali a cantarle las cuarenta al hijoputa del chulo. que en cuanto me vio aparecer se largo cagando leches. MaryJoe me volvio a coger el nabo y yo me disculpe con un piropo. Pobre MaryJoe, tal vez ya no es la mejor comepollas del Soho.
 
 La he vuelto a buscar por todos los garitos del Soho y nadie sabe decirme nada sobre ella. El Barman del Red Lion asegura que durante una semana estuvo alli todas las madrugadas, pero desde aquella noche no la ha vuelto a ver. A mi me la han mamado muchas mujeres, pero como esa española, ninguna. Ya sabes, si viene por tu zona me avisas.


El hombre de la barra II


Amo las noches veraniegas en Londres. Todo se vuelve silencio, calma y una brisa inunda cada dia, mi paseo a la salida del enrarecido aire del Subway, donde trabajo desde hace años en turno de tarde como policia de seguridad. Antes de irme a casa, donde nadie me esopera, me gusta pasar un rasto en algun PUB del Soho. Aquella noche me decidi por el Red Lion, un lugar intimista donde se respira un ambiente entre intelectual y melomano, no en vano han pasado por aqui desde el escritor Thomas Mann, a los Beatles, los Rollings o David Bowie, en sus noches de juerga en ambientes alternativos.

El SOHO ha dejado de ser ese barrio de dudosa fama, lleno de prostitutas de baja alcurnia, traficantes, hippies y gays, que fue en su dia, para convertirse en el Montmatre londienense, donde cualquier artista novel que se precie, ha de dejarse ver.

El Rede Lion como te decia, aglutina todo ese encanto en sus viejas paredes de madera de ese color verde oscuro y discreto, mezcaldo con colores de madera caoba. Olores a te, a cafe, a cerveza guines, a libros. En un lateral llama la atencion una singular biblioteca plagada de titulos sobre opiaceos, alcoholes y drogas de todo tipo, incluidos tratados sobre musica sicodelica, muy a juego con el contexto e interesantes titulos sobre sexualidad. Es la biblioteca del placer. Siempre se con ser escritor y escribir a la felicidad y que alguno de mis libros estuviese en aquella endemica libreria.
 
 Aquella noche, como te decia, llegue tarde y el Pub estaba casi desierto. Localice una chica sentada al fondo, aspecto diferente, exotico, mirada intensa, andaria sobre los 35 años, no leia, solo observaba mientras tomaba algo, parecia un ginger ale, sin duda debia de ser una turista, de eass que quieren conocer hasta el ultimo rincon de la city en personal aventura, a tenor de que el SOHO casi nunca queda dentro de los circuitos turiticos.
 
Me acerque a la barra y me pedi un escoces. Me gusta saborearlo lentamente. A mi lado una pareja joven, calcule que metidos en la treintena, discutian. Note que ella era muy atractiva y me miraba mas que observaba, desde que cruce la puerta. Con los años, uno aprende a mirar y a sentir las miradas como lo hace una mujer, discretasmente, como sin darte cuenta, de soslayo, casi desde dentro. Ellos como te decia, discutian, el parecia celoso por algo que debio suceder con anterioridad, y al notar que ella me miraba con descaro, el chico salto en colera y salio raudo a la calle, imagino que para calmarse o esperando inocentemente que ella le siguiera. La chica se acerco descaradamente mirandome a los ojos mientras se humedecia los labios con su lengua, y se presento como MaryJoe, note que habia tomado alguna copa de mas y que su acento era extranjero, de algun pais del este, tal vez. Se fijo en la cicatriz que desde mi ceja derexcha hasta mitad de mi cara adorna mi rostro, me pregunto, le respondi que era un regalo de mis años al servicio de su gloriosa Majestad, en la guerra de Irak. eso de que fuese una autenticas herida de guerra, parece que le excito, entonces alargo su mano y ,mas que tocarla, la acaricio, para despues deslizar sus dedos hasta mis labios. Comprenderas que un gesto asi, de una mujer como aquella, encendiera el rescoldo mas apagado de un hombre solitario, cercano a los 50 años. Nos besamos, casi nos devoramos. Olia a alcohol. Aquello era algo inusual en mi, inaudito, extraño. Por un momento algo primitivo se apodero de mi. Fue como un cortocicuito. La aparte, decidi irme al baño a bajar aquella excitacion que no controlaba. Hacia demasiado tiempo...demasiado tiempo de tantas cosas...
 
Note por el rabillo del ojo, que la extranjera me miraba, se levantaba y me seguia en direcion al WC. Su actitud me hizo recordar en aquel momento, quie en semanas recientes una oleada de protitutas hungaras, de elegante porte, habian desembarcado en la zona este de Londres.

Sin saber porque, deje que se acercara, y note que sus manos me empujaban delicadamente hacia el mal iluminado baño de señoras. Estupidamente Le pregunte si era Hungara (Are You Hungary?), ella me contesto que si (Yes, I´m hungry). Sonaban ruidos fuera. Entonces me beso apasionadamente y casi sin darme cuenta se habia desnudado dejandose solo una breves braguitas que ya parecian humedas. Comenzo a desnudarme de cintura para abajo. Aun me duraba la excitacion que me produjo la chica medio hebria de la barra. Lo hicimos casi sin mediar mas que breves pàlabras, a mi solo me salia “Sweet, Honey”, y ella inexplicablemente me llamaba "cariño" en español, palabra que conocia, de mi epoca de juerga durante maniobras militares en de Gibraltar y Rota.

 Nos vinimos juntos, creo que no es necesario contarte que aquello fue impresionante hasta para mi, que no acostumbro a ir con prostitutas hace mucho. Pero aquello fue otra cosa, aquello fue delicioso, fue arte, en aquel baño, que por instantes y sin dejar de ser cutre, me parecio maravilloso. Volvio a besarme. Os juro que si nadie nas ha enseñado a besar, aquella mujer podia.



No mediamos mas palabras. La deje vistiendose y pense que 50 libras seria lo justo, si es que aquello se podia valorar. Sali. El novio de la chica habia vuelto, habia un par de sillas tiradas en el suelo. Seguian discutiendo acaloradamente, pero él, al verme, volvio a largarse. Me acerque a MaryJoe para despedirme educadamente con un beso breve, y me marche.
 
He vuelto una noche tras otra al Red Lion, esperando encontrar a aquella singular mujer, que mas da si era hungara o española. Una mujer asi solo se cruza una vez vez en tu vida, o tal vez ninguna.


El Barman

En verano la gente se vuelve loca, se calienta, te rompe el kiosko por cualquier huevada. La otra madrugada tuvimos una escenita. Una pelea de putas, que otra cosa puede haber por aqui desde que esto de la comunidad europea ha abierto las puertas a todas las prostitutas del este. Los de siempre: las putas, los chulos y la policia. Por lo menos me encontre 50 pavos en el lavabo. Tengo que llamar al fontanero porque ese retrete ya no va a aguantar otro polvo.

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