A Víctor, por el regalo de la inspiración
Mas que
amarla la adoraba.
Rubia y
estilizada, ágil y altiva, desocupada e indolente.
Mimosa y
silenciosa.
Ella
nunca aceptó la falsedad, y cuando me dejó me convertí en el
hombre huraño que además perdió una lección de continua
armonía, de belleza,
de independencia y de humildad; porque ella no era de fácil
halago, sino de
sencillo desprecio.
“ ¡ Oh
mi amada triste y azul ¡”
¡ Mi
amada Miss Cifú ¡ - que ni siquiera me dijo “miau” el día que me
abandonó.
Me parece magistral tu manera de describir el carácter felino: "ágil y altiva, desocupada e indolente. Mimosa y silenciosa." ... "ella no era de fácil halago, sino de sencillo desprecio"
ResponderEliminarUn gato siempre se cree superior a su amo, y lo peor es que tiene razón, jejeje !